Desde que era pequeña siempre me he sentido fascinada por el
vidrio, por su manera de reflejar la luz, su transparencia y su
delicadeza. Pero, dentro de esa delicadeza, nos encontramos con la
solidez de sus formas y la rigidez de su porte. Esta
contraposición es precisamente lo que lo convierte en un material
muy versátil que ayuda a reforzar ciertos estilos
decorativos.
Como telón de fondo y para ilustrar lo que te estoy contando,
voy a hablar de dos estilos con el vidrio como eje
conductor; el estilo decorativo romántico y el
industrial.
Las flores son románticas por naturaleza. Por
eso algo tan simple como unos jarrones pequeños con flores
casi sumergidas es suficiente. A mí me recuerdan a
los nenúfares de pequeñas lagunas dando lugar a una
bellísima imagen.
Sin embargo, como puedes apreciar en la de la derecha,
el estilo industrial necesita equilibrar el uso de
esas flores reutilizando material de laboratorio como
jarrones improvisados, creando así nuestro
pequeño laboratorio botánico.
Fem y Flickr
Las damajuanas están ahora de actualidad;
solas o con grandes ramas siempre quedan perfectas en cualquier lugar
aportando un aire rústico y campestre. En
estas dos fotografías, los recipientes se encuentran
vacíos y sin embargo no han perdido ni un ápice de
personalidad.
Design y Bodie and
Fou
Igual que asociamos las flores con el romanticismo asociamos
las bombillas con el estilo industrial. Este ejemplo que voy a
poner ahora podríamos considerarlo antagónico al de las
flores. En la imagen de la izquierda, para que no haga contraste con el
resto de la decoración, han decidido envolver la bombilla en un
farolillo mint desgastado y han conseguido no restarle protagonismo.
En la fotografía de la derecha, basta con dejarlas caer
libremente a diferentes alturas. Los cables están pulidos y
conforman un contraste elegante con el fondo blanco de azulejos.
Design y Interiors
by StudioM
Me encantan los candelabros hechos con botellas y
frascos, los primeros están hechos con botellas y se han
utilizado de una manera bastante tradicional. Las han customizado
con un papel de estilo antiguo y las han convertido en unos
delicados candelabros para el centro de la mesa.
El segundo es más original y combina el vidrio con un
material industrial por excelencia; el hierro. Pero en
su justa medida. Preciosa mezcla.
Por último una imagen en la que la línea
entre lo romántico y lo industrial es muy fina pero
igual de inspiradora. Las botellas difuminan la luz de las velas y
el espejo que hay debajo la refleja creando un ambiente muy especial. El
aporte industrial lo hace la madera desgastada y el marco
metálico del espejo. Todo esto deriva en un rincón
único e íntimo.
Y hasta aquí hemos llegado. Espero que te haya gustado este
recorrido tanto como a mí.
Termino con una curiosidad ¿sabías que el estilo
industrial y el romántico vienen ambos del siglo
XIX? Quizás por eso tienen tanto en común y
combinan tan bien.
Hasta pronto.
Elena es una emprededora nata, tiene 29 años, viene de La Coruña y es amante de los animales. Escribe sobre temas de decoración en su blog http://lucecuvinilos.com/blog.
Se graduó en Bellas Artes, en enero de 2014 montó su propia tienda online donde vende unos preciosos Vinilos Decorativos. También realiza diseños personalizados, así que si tienes en mente un idea para decorar tus paredes, Elena lo hará realidad.
lacasaconchanclas s dice
Pero qué bonito luce el vidrio de esa forma!!!
Bss